Que es primero, la comida o el estado de ánimo?

Mientras que la mayoría de los científicos están de acuerdo en que algunos alimentos actúan como un interruptor al comerlos, no tienen claro las causas. Por que, no es fácil establecer una asociación directa entre nuestra química del cerebro y la respuesta física o emocional. Debido a que tenemos predisposiciones algunos alimentos basados en condiciones previas, que asociamos a sensaciones positivas. Por ejemplo, si tu madre te recompensaba con una galleta de chocolate cuando te iba bien en el colegio, tú podrías hacer lo mismo de adulto cada vez que finalizas una tarea difícil. O quizás escoger ciertos alimentos que no está relacionado con tu estado de ánimo, si no que tu cuerpo esta necesitando algún nutriente; esto puede significar que escojas una naranja para picar por su contenido de vitamina C, en este caso el estado de ánimo no afecta la elección de este alimento.
O tal vez los sentimientos son los que lo lleven a escoger los alimentos: un trozo de tarta puede aliviar el aburrimiento; el crujiente de una zanahoria o un apio debería aumentar el hambre. Debido a la compleja interacción de los alimentos en el estado de ánimo, los estudios en esta materia, aun están en sus inicios.

Diseñar estados de ánimo

Considerando las revelaciones actuales de la ciencia; que podríamos poner en práctica en nuestra vida cotidiana? El Dr. Cristie piensa que cada situación personal es diferente. Las personas sometidas a un día estresante pueden considerar que un snack a base de carbohidratos al final de la tarde le ayudaría a relajarse un poco. Sin embargo si tienes una reunión muy importante a las 4 de la tarde, puede tener mas sentido escoger un snack rico en proteínas, como un yogurt bajo en grasas, para conseguir un efecto de alerta mental.

La interacción entre la química cerebral de las personas y los alimentos es compleja: no todos los alimentos afectaran por igual a todos. Por ejemplo, mientras los alimentos ricos en carbohidratos producen un efecto calmante en la mayoría de las persona, estos muestran un efecto estimulante y energizante para quienes experimentan el síndrome premenstrual o la depresión de invierno (un desorden afectivo estacional). Tener en cuenta que si elegimos nuestros alimentos de manera conciente, estos tienen el potencial de recargar, sostener y nutrir nuestras emociones y estados de ánimo.

Con estas ideas en mente, hay algunas sugerencias del Dr. Carper que son detalladas en su libro Los alimentos, Su Medicina Milagrosa (Food-Your Miracle Medicine):

Potenciadores de energía. Alimentos ricos en proteínas: mariscos bajos en grasa, pechuga de pavo, leche desnatada, yogurt desnatado, café; alimentos que contiene boro, tales como frutas, nueces, legumbres, brócoli, manzanas, peras, melocotones y uvas.

Refuerzos para la memoria. Alimentos que contiene tiamina; germen de trigo, salvado, nueces, cereales fortificados, carne; alimentos que contienen riboflavina: almendras, cereales fortificados, leche, hígado; alimentos que contienen caroteno, hojas verdes, vegetales de hojas, naranja, etc; alimentos ricos en zinc, mariscos, legumbres, cereales integrales.

Mitigan la depresión (Blues Busters). Legumbres, pasta, vegetales, pan, galletas, dulces; alimentos que contienen ácido fólico: vegetales de hojas verdes, como espinacas, habas; alimentos que contienen selenio: nueces de brasil, atún enlatado, ostiones cocidos, semillas de girasol, trigo inflado, pez espada, almejas, ajos, chiles (que contienen capsaicina).

Alivian la Ansiedad. Los carbohidratos complejos, especialmente las patatas, pasta, panes, legumbres y cereales en general, cebolla; snacks: miel o azúcar, alimentos bajos en grasas y ricos en carbohidratos, tales como palomitas, tortitas de arroz, cereales para desayunos. Evitar la cafeína (café, te negro y verde, colas, chocolate), especialmente aquellos que no forman parte de tu dieta habitual- el consumo repentino de cafeína podría crearte mas nervios y ansiedad. Evitar el alcohol.

Reguladores de la memoria. Las grasas saturadas de origen animal. Manteca, mantequilla, carnes ricas en grasas, aves, pescados, quesos y productos lácteos; alcohol.

Al considerar que alimentos y cuando, lo principal es no hacer daño. Si alguna recomendación de un alimento en particular que podría ser apropiado para tu estado de ánimo entra en conflicto con tus preferencias, este alimento podría no ser apropiado para ti. Cuando valores las recomendaciones sobre los alimentos y el estado de ánimo, pregúntate a ti mismo si esto eso razonable para ti y si puedes incorporar algún alimento a tu dieta sin causar conflicto. Considera el beneficio potencial de ciertos alimentos con tus preferencias personales. La meta es llegar a ser consientes del sutil mensaje de los alimentos, hacer una selección de estos para conseguir mas control sobre nuestros estados de ánimo, y en el proceso aumentar nuestro bienestar espiritual.

Saboreando alimentos y sentimientos

En definitiva, los estudios sobre alimentos y estados de ánimo muestran como la mente y el cuerpo trabajan juntos. Siendo concientes de esta conexión los alimentos nos ofrecen una oportunidad de prestar atención y conectarnos con nuestra mente-cuerpo.
Visto desde esta perspectiva, cada alimento que comemos puede ser una oportunidad no solo de alimentar nuestro cuerpo, también para afinar nuestros estados de ánimo y emociones. De esta forma comenzar un camino hacia nosotros mismos, una herramienta de auto exploración.
  
Si hacemos una selección conciente de nuestros alimentos, estos tendrán el potencial de hacernos sentir su orden, armonía y bienestar. En definitiva, este potencial alimento a nuestras emociones y estados de ánimo, pueden acercarnos a nuestro ser espiritual. Si nos detenemos en considerar las  sensaciones y efectos de los alimentos podremos darnos cuenta de su capacidad de nutrirnos y transformarnos sutilmente.

Comer para mejorar las emociones

Algunas sugerencias para mejorar nuestras emociones desde la mañana a la noche:

-Desayuno: 4 onzas de jugo zumo de frutas; 1 taza de yogurt (lácteo desnatado); ½ taza de granola (cereal integral)

Cápsula de nutrientes: Bajo en grasas, rico en carbohidratos complejos, rico en proteínas, densidad de nutrientes.

Estrategia food-mood: Calmar y energizar.

-Media mañana: Cereal integral, galletas bajas en grasas, lácteo desnatado.

Cápsula de nutrientes: rico en proteínas, rico en carbohidratos.

Estrategia food-mood: Calmar y energizar.

-Comida de negocios: Ensalada hecha con vegetales de hojas verdes, aderezo bajo en grasa, 30 g de queso feta o fresco; 30 gramos de tófu; 1 trozo pequeño de pan integral.

Cápsula de nutrientes: Rico en proteínas, bajo en carbohidratos, bajo en grasas.

Estrategia food-mood: Mejorar el rendimiento y alerta mental.

-Recoger los niños en la guardería: Un trozo de pan o galleta integral.

Cápsula de nutrientes: Rico en carbohidratos, bajo en proteínas, bajo en grasas.

Estrategia food-mood: Aliviar el estrés temporal rápidamente.

-Cena: Sopa de legumbres, ensalada de hojas verdes, pan de maíz; arándanos.

Cápsula de nutrientes: Rico en carbohidratos, bajo en proteínas, bajo en grasas.

Estrategia food-mood: Calmar después de un día estresante.

-Antes de acostarse: Cereal integral.

Cápsula de nutrientes: Rico en carbohidratos.


Estrategia food-mood: Inducir la relajación y el sueño.

Kesten D. (2007) Feeding the Body Nourshing the Soul. Vermont, Editorial White River Press.